Sin embargo, al colocarse bajo los focos, ¿no habrá creado la receta perfecta para el desastre?. Sumida en un torbellino de cámaras y desafíos, Jenny empieza a desenterrar algunos de sus recuerdos. La tarta de chocolate le trae a la cabeza aquel recado furtivo en el que llevaba puesta una alianza que no le pertenecía; los dónuts glaseados, un gesto amable de un desconocido; y una sencilla rebanada de pan, el instante que le cambió la vida.