El compro una esposa. Ella compro una vida de lujos. El desea poseerla a toda costa. Ella puede verlo ni en pintura... literalmente. Javier Vazquez es un millonario arrogante, como todos los futbolistas de futbol retirados que saben que hacer con su dinero. A dia de hoy tiene una mansion de ensue en una urbanizacion de lujo, mas ceros en su cuenta corriente de los que puede derrochar, y aunque en su movil tiene una bochorsa cantidad fotos explicitas de diversas mujeres, ha comprado a una esposa. Belen. Belen: Algunas amigas dicen que he vendido mi alma al diablo, pero, que hubieras hecho en mi lugar? He trabajado en supermercados, tiendas de ropa, restaurantes y otros empleo basura de los que quiero ni hablar. Y todo porque nadie me explico que eso de ir a la universidad y graduarse como psicologa era una idea brillante... si quieres morirte de hambre porque hay trabajo. Asi que, si. Cuando, como el mas pesimo de los cliches, un tio bue se me acerca en una discoteca y me doy una alegria - para variar -, lo ultimo que hago cuando me entero de que ha metido -se-que gol de final-de-la-champions-league es rechazarlo. No cuando me ofrece un anillo con una piedra mas grande que mis ojos, una mansion que quita el hipo y, si, una vida de ensue. Bue, todo lo de ensue que puede ser una vida donde, conforme entras por los portones de tu casa, ademas de la sirvienta te encuentras con un cuadro de el pateando un balon. En serio, Javier Vazquez es el hombre mas narcisista, vanidoso y creido que cozco. Pero me extrana teniendo en cuenta que es mas rico que el presidente del gobier. Creo. Si, somos tal para cual. La pareja perfecta. El sigue acostandose con quien quiere, y yo a cambio puedo dedicarme a tomar martinis en la piscina. Que le jodan a el, al mundo, y a su gigantesco... ego. Javier: La idea era muy buena, me entiendas mal. Yo me agenciaba una esposa con un cuerpo escultural, y a cambio los medios de television dejaban de prestar tanta atencion a con quien me acostaba o dejaba de acostar. No solo ganaba una tapadera para mis amantes, si una mujer 10 en mi cama cada che que quisiera. Esa era la idea. La lastima fue haber firmado ningun contrato diciendo que tenia que acostarse conmigo. Se me quedo una cara de tonto preciosa cuando me dijo que tenia pensado tener sexo conmigo, pero que la dejase tomar martinis y sonreir ante la prensa o se plantaba en television a contar todos mis trapos sucios. Pero va a quedar asi, por supuesto. Belen tiene ni idea de con quien esta tratando. Si tengo que salir desnudo mientras toma el sol, lo hare. No puede ser de piedra. Le caiga mejor o peor, es imposible que sea la unica mujer del universo que se rinde ante un cuerpo definido con abdominales para rallar queso y sexo de lujo, tanto por la calidad como por el ambiente. Esa chica va a saber que Javier Vazquez, a la hora de la verdad, siempre la mete. Nota: Una vela romantica con fuertes dosis de erotica explicita y humor. No pide perdon por decir las cosas sin pelos en la lengua, por elevar la temperatura de la habitacion ni por suponer una irreverencia maleducada al convencionalismo social. Recordamos que la vela empieza con un matrimonio de conveniencia y punales en la espalda.